El metaanálisis, como parte de la revisión sistemática, suele definirse como el análisis estadístico que combina los resultados de múltiples estudios científicos, que tienen como objeto de resolver el mismo tipo de problema (Glass, McGaw, & Smith, 1981), verificando la consistencia de las soluciones alcanzadas por los distintos autores, y por tanto facilitando la acumulación del conocimiento (Marín, Sánchez y López, 2009). Es decir, integra los resultados cuantitativos de estudios separados pero similares en sus objetivos/técnicas proporcionando una estimación numérica del efecto general de interés (Petrie, Bulman & Osborn ,2003). Incluso es posible extenderse a otros metaanálisis previos, con lo cual nos encontraríamos en situaciones de meta-metaanálisis (Mingebach, Kamp-Becker, Christiansen & Weber, 2018)
Opcionalmente, es posible asignar diferentes pesos a los diferentes estudios para calcular el estadístico final. Esta ponderación se relaciona con la inversa del error estándar (indirectamente con el tamaño de la muestra) informado en los distintos estudios contemplados. Es decir, los trabajos con un error estándar más pequeño y un tamaño de muestra más grande tienen más peso en el cálculo del tamaño del efecto agrupado.